domingo, 5 de junio de 2016

POR QUE EMPIEZO A CORRER...

Todo comienza a principios del 2009, todo apuntaba a que no había comenzado muy bien el año.
Mis síntomas eran los siguientes, tenia mucho frío, daba igual lo abrigado que estuviera, siempre tenía frío, hasta aquí todo normal ya que hay mucha gente que es friolera y siempre tiene frío.
El siguiente síntoma que tenía era que siempre estaba cansado, muy cansado, daba igual todo lo que descansara, siempre quería estar durmiendo, podría pasarme horas y horas durmiendo, pero este síntoma tampoco era muy esclarecedor de lo que me pasaba, ya que por esta época yo trabajaba de escolta y me levantaba a las 4 de la mañana y solía acostarme tarde, por lo que yo pensaba que mi cansancio era normal.
Había un tercer síntoma el cuál yo no era consciente de el, solo la gente que no me veía muy amenudo y que no era muy cercana a mi me decían, que cada vez estaba mas fuerte, que dejara de ir al gimnasio.
Yo pensaba que no tenía mucho tiempo para ir al gimnasio, que tan solo cuando el trabajo me lo permite voy a mis entrenos de Judo y con el las pesas, pero esos entrenamientos que yo hacia se habían reducido en casi un 80%, por lo tanto no es posible que la gente me vea tan fuerte como decían.
Empecé a pensar que no era normal lo que me estaba pasando así que tomo la determinación de acudir al médico de familia y contarle todo lo que me pasa y como me siento.
El médico me manda una analítica de sangre para ver como estoy.
Los resultados de la analítica son claros siempre desde el punto de vista del médico, estoy bien salvo por un pequeño detalle como es el llamado colesterol malo, lo tengo muy alto, por encima de los niveles normales, asi que me manda un régimen muy exhaustivo y que vuelva en un mes para repetir la analítica y ver como voy.
Al cabo de un mes vuelvo y después de de seguir a raja tabla el régimen le explico al médico que sigo igual y que los síntomas no solo no han remitido si no que han aumentado, que tengo muchisimo frío, que solo me apetece dormir de lo cansado que me encuentro y que en cuanto tengo una minima actividad soy capaz de quedarme dormido en cualquier sitio, y eso para mi profesión es muy peligroso.
Me repite el análisis de sangre junto con otro de orina , y que continúe con el regimen hasta ver los resultados de ambos análisis.
Yo como buen paciente continuo con el régimen hasta que llega el dia de la cita para darme los resultados, que vuelven a ser claros como el primero que hice, todo es correcto, todo lo tengo en los valores normales excepto el colesterol malo que con respecto al primer análisis ha bajado algo pero sigue estando por encima de los valores normales, conclusión, que el régimen esta funcionando y que tengo que continuar con el hasta dengtro de otro mes que vuelva a ver como voy junto con otro análisis previo que tengo que hacerme antrs de la cita con el.
Los días pasan mis sintomas siguen siendo los mismos, y un dia voy a comer a casa de mi madre y le comento y explico lo que me pasa y como me siento, y que acierto, como son las madres, y es que ya lo dice el dicho, madre no hay mas que una.
Me dice y me explica que en la familia hay antecedentes de tiroides, que si el médico me ha echo esas prueba, tras unos instantes inmovil y pensarlo, contesto que creo y pienso que no, pues cuando vayas la próxima vez ( no dice eso exactamente, ya sabemos como son las madres, dice que llame inmediatamente para ir lo antes posible ), que se lo diga.
Por mi trabajo no tengo mucho tiempo para ir al médico, así que espero los 10 días que faltan
para ir y explicarle la teoría de mi madre.
Llega el dia de la cita, paso a consulta y tras explicarle al medico la teoría maternal ya que yo continuo igual, y que podemos ver esa opción, el médico me mira con cara de huevo, y tras unos segundos en silencio observo como el médico esta analizando dicha información y ya por fin arranca y me dice,
-no había pensado en ello, así que te voy hacer una analítica específica de tiroides y veremos el resultado.
Unos días despues me realizan el análisis, y 48 h. después me dan el resultado, y da justo lo que yo no quería escuchar, soy hipotiroideo autoinmune en su máximo grado.
Que quiere decir eso, que desde ese mismo momento voy a necesitar una pastilla todos los días del resto de mi vida en ayunas antes de ingerir cualquier alimento, junto una revisión médica para ver los niveles todos los años por si hubiera que cambiar la dosis.
Para los que no sepan que es el hipotiroidismo es una enfermedad la cual hace en mi caso que como no me funciona la tiroides como debe, hace que engorde a pesar de tener dieta, pero las pastillas hacen que todo se regule y sin necesidad de la cirugía vuelva a funcionar bien.
Lo que no quería yo tampoco era pasar por quirófano ya que cuando te operan te dejan una gran cicatriz a lo largo del cuello como si te hubieras intentado ahorcar, así que mejor la pastilla de por vida que una horrible y fea cicatriz.

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