martes, 28 de agosto de 2012

NI CRISIS NI NADA...AMOR.

Unos dicen que puede ser la tan famosa crisis de los 40, si esa que siempre las mujeres en tono jocoso pero muy en serio dicen que padecemos todos los hombres, pero si es eso pienso que a mi me llega con un año de retraso.
La historia comienza cuando un buen día y a finales de mis cuarenta primaveras y al comienzo del otoño en mi lugar de trabajo el cuál realmente y por mi situación laboral de un cambio de categoría que ahora no viene a cuento, no sabía si me iba a quedar y que futuro tenía, pero al verla fue algo especial, me gustó desde el primer momento en el que la vi, milésimas de segundo de un intercambio de miradas que fue suficiente.
Creo que no hay que hecharle la culpa a la famosa crisis de los 40, no,  yo creo que es la acumulación de varios factores, pero que el principal es la infelicidad.
Si es verdad que a lo mejor no lo hecho de la mejor manera, tal vez sea un capullo por no decir otra cosa mas fuerte como me llama mi ex-mujer, pero la realidad es la que es.
Estoy en una nueva etapa de mi vida, la estoy comenzando y como todo comienzo es muy bonito, estamos alojados en el mundo perfecto, pero todo cambia y suele llegar con el tiempo, ya que el tiempo es el verdadero juez y es el que dicta sentencia.
Para unos llega antes que para otros pero tengo que decir que han sido tres meses de locura, casi inenarrables, pero hay están, no los cambio por nada del mundo, y por como va la historia tiene pinta de ser ya algo definitivo, ya de por vida, mi cadena perpetua de amor y felicidad.
Tal vez el destino me ha jugado una mala pasada y lo que me tenía predestinado para mi reencarnación me lo haya adelantado, lo que no se si como castigo o como premio por lo bien que lo estoy haciendo sin caer en ser un presuntuoso.
el caso es que ahora ya habiendo cumplido mis 41 primaveras estoy como nunca, soy muy feliz, he conseguido tener una paz interior que nunca hasta ahora había tenido, la verdad es que todo el mundo que me conoce sabe que no me gusta ningún tipo de religión, ni dios, soy lo que se podía llamar un ateo y un agnóstico, ya que creo solo en mi trabajo y en lo que dice el refrán de quien siembra recoge, es decir me pasará lo que yo haga, y me irá como yo sea, si parece un trabalenguas pero es lo que pienso.
Un ejemplo es si uno anda mucho con una banda de ladrones tiene todas las papeletas de terminar como uno mas de la banda, pero el caso contrario también existe y es si uno piensa que hace lo que debe en cada momento y con esto me refiero a lo mas correcto que dictaminan las normas de la sociedad tiene mas posibilidades de como dirían los católicos de ir al cielo.
Pero veo que me estoy desviando del tema que me interesa, y es de la felicidad y de lo importante para estar uno bien consigo mismo de ser feliz, y este es mi caso, y del que quiero hablar.
Yo no estoy nada de acuerdo de que los hombres a los 40 tengan una crisis que les impulsa a realizar cosas que suelen molestar por lo general a las personas que tienen más cerca que casi siempre suele ser la familia, lo que pasa es que creo que a los 40 se pasa a otra etapa donde hasta ahora el hombre lo único que ha hecho ha sido formarse en el duro juego de la vida y a los 40 ya sube ese escalón y está a un nivel superior donde ya tiene claro que es lo que busca y hasta donde quiere llegar.
No cabe duda de que mucha gente no estará de acuerdo conmigo y con mis pensamientos pero yo respeto los suyos como me gusta que respeten los míos.
En mi caso para empezar no ha coincidido con los cuarenta mas bien con los 41 aunque los defensores de que existe la famosa crisis dirán que da igual un año arriba que uno abajo, pero insisto que mi caso no es este.

A mi edad que para muchos ya soy viejo yo no solo de espíritu si no también de físico me siento como si tuviera la mitad, también hay que decir que los años no pasan en balde, y que la veteranía es un grado y que sabe suplir muchas de las carencias que se tiene con 20 años, y no me cambio, creo que es una edad perfecta, ya que pienso que es la que está a mitad del nacimiento y a mitad de la muerte, según se mire como pasa con el vaso para unos está medio vacío y para otros esta medio lleno.

Yo lo único que se es que he encontrado a esa mitad de la que todo el mundo habla y que no siempre se encuentra, o por lo menos no siempre a la primera, yo pensaba que lo había encontrado pero la realidad era otra hasta que encontré a mi Flaca, que no solo es mi media naranja la cual si encaja a la perfección si no que puedo decir que es mi alma gemela.
Un alma gemela a la que saco 11 años, si señores, si es verdad que ahora no se aprecian pero que de aquí a unos años yo por ley de vida seré un viejecito con garrota y encorvado y ella se puede decir que todavía será una fresca rosa del rosal, pero si a ella le da igual imaginense a mi.
Este es otro caso para estudiar, para los hombres sería muy hombre al estar con una señorita mucho mas joven que yo y para las mujeres dirian que seguro que estoy forrado por que si no no se explica como puede estar con ese viejo.

Tenemos muchas cosas en común que muchos pueden decir que eso puede llegar a ser peligroso, pero en esta vida hay que arriesgar y solo así puede que te llegue el éxito pero si no arriesgas nada de nada nunca llegará y por lo tanto no puedes protestar.
Pero no solo me ha traído paz y tranquilidad, esta relación me ha traído un viento fresco que necesitaba desde hace mucho que ha evitado que cayera marchitada.
He recuperado esa juventud que se me negaba por edad que no por espíritu, en estos tres meses he realizado cosas que soñaba con ellas y que pensaba que nunca iba a poder realizar, cosas como en fundarme en una cazadora de motero con la que siento como sube aún mas mi auto estima y juventud que junto con un casco y los guantes hacen que como la mariposa sale del capullo mi alma aventurera estalle y quiera recorrer el mundo entero en moto.
Son muchas las actividades que ha realizado la Flaca, actividades que quiero y que siempre he soñado con realizar, actividades que espero poder realizar y compartir con ella. 

Señor@s aquí lo único que cuenta y a lo único que le voy a prestar el máximo de atención es a lo que yo pueda hablar con mi pareja, de como nos va, si somos felices el uno con el otro, si seguimos completandonos, si nos queremos, y todo lo demás NO ME IMPORTA.
Así que por favor solucionen sus problemas, y dejen los de los demás, o como decía mi abuela barre primero tu casa antes de criticar la limpieza de las demás.

Lo primero es mi felicidad la tuya me importa pero no me interesa.